LOS SALMOS: LA ORACIÓN DE ISRAEL
Al abrir el libro de los Salmos, nos viene la pregunta sobre qué son exactamente. Podemos responder diciendo que se trata de una recolección de 150 poesías, cada una independiente. Han sido escritas en épocas muy diferentes y responden a diversas situaciones de la vida del pueblo de Dios. De los salmos, 73 son atribuidos a David, más bien dedicados a él. Otros a Salomón. Mejor es pensar que se trata de una cadena anónima de poetas que a lo largo de siete u ocho siglos ha ido componiendo lo que hoy conocemos y gustamos en el libro de los Salmos.
El Salmo más largo de la Biblia es el 119 –que puede ser llamado el Salmo de la Palabra- y repite sin cesar que en la palabra de Dios tenemos vida y felicidad.
Los Salmos son la expresión de la experiencia humana vuelta hacia Dios. Las circunstancias de la vida y de la historia van dando a los Salmos un realismo único. A través de sus imágenes y símbolos Dios pide una fe concreta que significa ponernos confiadamente en sus manos o “como un niño tranquilo en brazos de su madre” (Sal 131, 2). Muchos salmos fueron compuestos para la liturgia.
A. Clasificación de los Salmos
I. Salmos para las grandes fiestas:
1. Salmos para celebrar la renovación de la Alianza, por ejemplo: Sal 50, 81, 95, 105, 106.
2. Salmos de Sión, que cantan a la ciudad de Jerusalén, construida sobre este monte: Sal 89, 122, 78.
3. Salmos de peregrinación: Sal 48, 84, 102.
4. Salmos reales, que celebran al rey: Sal 2, 21, 72.
5. Salmos de Alabanza a Dios, rey único y universal: Sal 24, 47, 66, 67, 68.
Las fiestas no son cada día, pero celebrar a Dios es un culto diario. Así podemos encontrar salmos que se usan para comenzar la alabanza (Sal 15, 100, 150). Y otros que sirven para concluir el culto como el Sal 134.
II. Existe también el llamado culto votivo, que se realiza en un momento determinado de la vida de una persona o del pueblo, sobre todo si se trata de problemas. Así tenemos:
1. Oraciones de súplicas
- Públicas, todo el pueblo ora, por ejemplo: Sal 44, 60, 74.
- Privadas, por ejemplo: en enfermedad, Sal 22, 38
persecuciones o acusaciones, Sal 54, 55, 56, 142, 143.
2. Oraciones de Acción de Gracias
También se puede distinguir oración pública y privada: Sal 18, 65, 67 y 30, 40, 92, respectivamente
III. Himnos que cantan alabanza a Dios y suelen ser comunitarios. Su tema es frecuentemente la acción de Dios en la creación y en la historia, por ejemplo: Sal 104, 105. Hay otros salmos que tienen otros temas: El pastor, Sal 23. El matrimonio, Sal 45.
B. Mensaje de los Salmos
1. Dios es el Señor todopoderoso, Señor de la creación entera (Sal 104), Señor del hombre (Sal 8), Señor de la historia humana (Sal 47, 98).
2. Dios interviene en la historia para salvar al hombre:
¡Aleluya!
<> (Sal 113)
3. Si Dios actúa es porque ama (Sal 103, 32, 131).
4. Nuestro Dios no nos defrauda nunca, sólo en Él ponemos nuestra esperanza.
Israel nos da el ejemplo de la confianza en Dios. Así hay Salmos de lamento, en momentos de persecución, de pecado, etc. (ver Sal 18, 39).
Sobre todo se pide a Dios que mejore las relaciones entre los hombres; lo que nosotros destruimos, todo se resume en oraciones para pedir la justicia (Sal 85, 94, 72, 98).
Los Salmos son también oraciones privilegiadas de la comunidad cristiana y del creyente.
C. Cristo y los Salmos
No hay duda de que Cristo rezó con los Salmos que eran las oraciones propias del pueblo de Israel. Un ejemplo de esto es el momento de la cruz en que Jesús se dirige a su Padre con las palabras del Sal 22 (ver Mc 33-39).
Además, Jesucristo es quien da el sentido pleno a los salmos. En Él se cumple lo que se anuncia en ellos. El Sal 23, por ejemplo, habla de Dios como pastor de su pueblo. Más tarde Jesús dirá que Él es el Buen Pastor que da su vida por las ovejas (ver Jn 10,13-15).
D. Los Salmos en la Eucaristía
Nuestra experiencia de fe pasa por la historia de Israel y por la vida de Cristo, de ese modo podemos encontrar en los Salmos expresiones de la oración cristiana.
Cada domingo rezamos el Salmo responsorial, entre la primera y segunda lectura de la misa. Rezamos los Salmos en comunidad y así vamos, paso a paso, descubriendo la riqueza de este libro.
Los Salmos constituyen una escuela de oración. Del mismo modo que los niños aprenden a hablar repitiendo las palabras que van oyendo a sus padres, nosotros aprendemos a orar al Señor repitiendo los Salmos, que son las palabras del mismo Dios que nos enseña a hablar con él.
Cada día podemos tomar un Salmo, sobre todo los indicados aquí, y orar con ellos para ir creciendo en nuestra oración personal y comunitaria
Al abrir el libro de los Salmos, nos viene la pregunta sobre qué son exactamente. Podemos responder diciendo que se trata de una recolección de 150 poesías, cada una independiente. Han sido escritas en épocas muy diferentes y responden a diversas situaciones de la vida del pueblo de Dios. De los salmos, 73 son atribuidos a David, más bien dedicados a él. Otros a Salomón. Mejor es pensar que se trata de una cadena anónima de poetas que a lo largo de siete u ocho siglos ha ido componiendo lo que hoy conocemos y gustamos en el libro de los Salmos.
El Salmo más largo de la Biblia es el 119 –que puede ser llamado el Salmo de la Palabra- y repite sin cesar que en la palabra de Dios tenemos vida y felicidad.
Los Salmos son la expresión de la experiencia humana vuelta hacia Dios. Las circunstancias de la vida y de la historia van dando a los Salmos un realismo único. A través de sus imágenes y símbolos Dios pide una fe concreta que significa ponernos confiadamente en sus manos o “como un niño tranquilo en brazos de su madre” (Sal 131, 2). Muchos salmos fueron compuestos para la liturgia.
A. Clasificación de los Salmos
I. Salmos para las grandes fiestas:
1. Salmos para celebrar la renovación de la Alianza, por ejemplo: Sal 50, 81, 95, 105, 106.
2. Salmos de Sión, que cantan a la ciudad de Jerusalén, construida sobre este monte: Sal 89, 122, 78.
3. Salmos de peregrinación: Sal 48, 84, 102.
4. Salmos reales, que celebran al rey: Sal 2, 21, 72.
5. Salmos de Alabanza a Dios, rey único y universal: Sal 24, 47, 66, 67, 68.
Las fiestas no son cada día, pero celebrar a Dios es un culto diario. Así podemos encontrar salmos que se usan para comenzar la alabanza (Sal 15, 100, 150). Y otros que sirven para concluir el culto como el Sal 134.
II. Existe también el llamado culto votivo, que se realiza en un momento determinado de la vida de una persona o del pueblo, sobre todo si se trata de problemas. Así tenemos:
1. Oraciones de súplicas
- Públicas, todo el pueblo ora, por ejemplo: Sal 44, 60, 74.
- Privadas, por ejemplo: en enfermedad, Sal 22, 38
persecuciones o acusaciones, Sal 54, 55, 56, 142, 143.
2. Oraciones de Acción de Gracias
También se puede distinguir oración pública y privada: Sal 18, 65, 67 y 30, 40, 92, respectivamente
III. Himnos que cantan alabanza a Dios y suelen ser comunitarios. Su tema es frecuentemente la acción de Dios en la creación y en la historia, por ejemplo: Sal 104, 105. Hay otros salmos que tienen otros temas: El pastor, Sal 23. El matrimonio, Sal 45.
B. Mensaje de los Salmos
1. Dios es el Señor todopoderoso, Señor de la creación entera (Sal 104), Señor del hombre (Sal 8), Señor de la historia humana (Sal 47, 98).
2. Dios interviene en la historia para salvar al hombre:
¡Aleluya!
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LOS SALMOS: LA ORACIÓN DE ISRAEL
1. Jesús rezó los Salmos como las oraciones por excelencia del pueblo de Dios del A.T. Anote aquí las circunstanciasen que rezó los siguientes Salmos (en la cruz, al morir o durante la Última Cena):
a. “Y Cantando los himno salieron hacia el Monte de los Olivos” (Mt 26, 30; Salmo 113-118):
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b. “¡Dios mío, Dios mío! ¿Por qué me has abandonado?” (Mt 27, 46; Salmo 22, 2):
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c. “Padre en tus manos encomiendo mi espíritu” (Lc 23, 46; Salmo 31, 6):
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2. Jesús dice más de una vez que vino a dar cumplimiento a todo lo que está predicho sobre El y su misión en el A.T. Busca en tu Biblia el texto indicado del A.T. y completa con el versículo del evangelio.
a. “Pan del cielo dio a comer” Jn 6, _____
Salmo 78, 24
b. “Yo soy la puerta si uno entra por mí estará a salvo; entrará y saldrá y encontrará pasto” Jn 10, _____
Salmo 23, 1-3
c. “Hosanna, Bendito el que viene en el nombre del Seño, el rey de Israel”
Jn 12, _____
Salmo 118, 25-26
d. “Tengo sed” Jn 19, _____
Salmo 69, 22
e. “Se repartieron sus vestidos, echando a suerte”
Lc 23, _____
Mt 27, _____
Jn 19, _____
Salmo 22, 19
f. “La piedra que los constructores desecharon en piedra angular se ha convertido; fue el Señor quien hizo esto y es maravilloso a nuestros ojos” Mc 12, _____
Salmo 118, 22-23
g. “Dijo el Señor a mi Señor; siéntate a mi diestra hasta que ponga a tus enemigos debajo de tus pies” Mc 12, _____
Salmo 110, 1
h. “Bendito el señor Dios de Israel” Lc 1, _____
Salmo 41, 14
1. Unir con una línea los versículos del Magnificat (Lc 1, 46-55) con los versículos de los Salmos a que se refiere:
Versículo Lc 1, 49 Salmo 107, 9
Versículo Lc 1, 50 Salmo 111, 9
Versículo Lc 1, 53 Salmo 103, 17
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