jueves, 6 de septiembre de 2007

Curso biblico: Tema 13




LOS GRANDES PROFETAS DE ISRAEL: AMÓS Y OSEAS

1. Amós, el profeta de la justicia

Durante el reinado de Jeroboam II (ver 2 Re 14, 23) hubo una época de riqueza y bienestar en el reino del Norte. La prosperidad, que se basaba especialmente en la agricultura y en el comercio, acentuó la diferencia entre ricos y pobres. Se cometían pecados contra el Señor y se trataba mal a los pobres y necesitados.

Dios escoge a un hombre sencillo, un pastor de la cercanías de Belén, con la misión de anunciar su mensaje y para denunciar las injusticias y pecados de esta época a fin que el pueblo y sus gobernantes se convirtieran. Este hombre es AMÓS. Amós es enviado al Reino de Israel para hablar con palabras y signos fuertes contra las injusticias de este tiempo. Podemos meditar algunos de estos textos:

Denuncias del profeta:

“Porque ellos venden al justo por dinero, y al pobre por un par de sandalias; pisotean sobre el polvo de la tierra la cabeza de los débiles y desvían el camino de los humildes” (Amós 2, 6-7).

Se cometía la hipocresía de ofrecer sacrificios a Dios descuidando al pobre y afligido. Pero Dios no acepta esto:

“Yo aborrezco, desprecio sus fiestas, y me repugnan sus asambleas. Cuando ustedes me ofrecen holocaustos no me complazco en sus ofrendas ni miro sus sacrificios de terneros cebados. Aleja de mí el bullicio de tus cantos, no quiero oír el sonido de tus arpas. Que el derecho corra como el agua, y la justicia como un torrente inagotable” (Amós 5, 21-24).

Amós llama a todos a la conversión, pero no lo hacen y les anuncia que serán desterrados a Asiria:

“Tu mujer se prostituirá en plena ciudad, tus hijos y tus hijas caerán bajo la espada; tu suelo será repartido con la cuerda, tú mismo morirás en tierra impura e Israel irá al cautiverio lejos de su país” (Amós 7, 17).

El exilio es calamidad, a la vez que una purificación. El anuncio de la venida de un Mesías será cada vez más fuerte. En torno a la fe en el salvador se constituye un pequeño resto que será fundamento del nuevo Pueblo de Dios:

Anuncios del profeta:

“Aquel día, yo levantaré la choza destruida de David, repararé sus brechas, restauraré sus ruinas y la reconstruiré como en los tiempos pasados, ... Yo cambiaré la suerte de mi pueblo Israel; ellos reconstruirán las ciudades desvastadas y las habitarán...” (Amós 9, 11.14).

2. Oseas, el profeta del amor

Oseas es un profeta acusador. El pecado principal que enrostra es el de la infidelidad a Dios. El libro presenta las relaciones de Dios y su pueblo con la imagen del amor conyugal. Los capítulos 1 al 3 relatan la experiencia personal de Oseas en su matrimonio, experiencia que aplica a la vida del pueblo.

El Señor quería la conversión de su pueblo, pero Israel no responde como él desea, el profeta describe el amor de Dios como el de un padre:

“Cuando Israel era niño, yo lo amé, y desde Egipto llamé a mi hijo... y yo le había enseñado a caminar... lo tomaba por los brazos. Yo los atraía con lazos humanos, con ataduras de amor; era para ellos como los que alzan a una criatura contra sus mejillas, me inclinaba hacia él y le daba de comer” (Oseas 11, 1.3-4).

Dios el esposo fiel y su pueblo la esposa infiel

El matrimonio del profeta es un drama y tiene valor simbólico. Oseas ha amado y ama a Gomer, su mujer, que ha respondido a su amor con la traición, se prostituye. Del mismo modo ha respondido Israel al Señor, corriendo tras otros dioses. Dios prueba a su pueblo con el castigo, pero le devolverá la alegría del primer amor.

Llamado a la conversión

Dios dirá palabras enigmáticas que significan la promesa de un nuevo comienzo:

“Por eso, yo la seduciré, la llevaré al desierto y le hablaré a su corazón” (Oseas 2, 16)

El castigo hará reflexionar a Israel, volverá a Dios y:

“El número de los israelitas será como la arena del mar, que no se puede medir ni contar; y en lugar de decirles: “Ustedes no son mi pueblo” les dirán “Hijos del Dios viviente”... Digan a sus hermanos: “Mi pueblo” y “Compadecida” (Oseas 2, 2-3).

Los crímenes y castigos de Israel están descritos en los capítulos 4 a 14, 1. Dos textos que nos hacen ver cual es la voluntad de Dios:

“Porque yo quiero amor y no sacrificios, conocimiento de Dios más que holocaustos” (Oseas 6, 6).

“Pero yo soy el Señor, tu Dios, desde el país de Egipto: no conoces a otro Dios más que a mí, y fuera de mí no hay salvador” (Oseas 13, 4 ).

Por fin llega la conversión y se puede mirar al futuro:

“...no diremos más “¡Dios nuestro!” a las obras de nuestras manos... Los caminos del Señor son rectos: por ellos caminarán los justos...” (ver Oseas 14, 2-10).

Nosotros también podemos rezar cada noche, en actitud de conversión:

“Borra todas nuestras faltas, acepta lo que hay de bueno, y te ofreceremos el fruto de nuestros labios” (Oseas 14, 3).

VOCABULARIO BÍBLICO

1. TORAH: Palabra hebrea que significa Ley (ver Gn 26, 5), las leyes escritas en los cinco primeros libros de la Biblia y finalmente estos cinco libros completos.

2. YAHVEH: Nombre de Dios más frecuente en el Antiguo Testamento (ver Ex 3, 14). Sobre el origen y sentido de la palabra se discute mucho entre los estudiosos, sin embargo, se puede decir que proviene del verbo ser en hebreo y significa “Yo soy”.

3. PROFETA: En el AT un profeta es un hombre llamado por Dios para hablar en su nombre. No es alguien que adivina el futuro, más bien recuerda la Alianza, denuncia el pecado contra ella, y al ver la infidelidad de Israel le llama a la conversión y le previene de las consecuencias de tal infidelidad. Anuncia la fidelidad de Dios que salvará a su pueblo, rescatando un pequeño “resto” de él y que aguarda la venida del Mesías.

Grandes profetas fueron Elías, Eliseo, Amós, Oseas, Isaías, Jeremías, Ezequiel y Juan Bautista. Como la gente no siempre estaba dispuesta a recibir su mensaje y los rechazaba (Mt 23, 37), debieron sufrir mucho, incluso la muerte. Jesús habló y actuó muchas veces como los profetas del AT (Mc 6, 15; Lc 24, 19), pero al mismo tiempo más que un profeta él es el Mesías a quien los profetas anunciaron. No habla en nombre de Dios, sino que habla como Dios (Mt 5, 21-45).

Por el Bautismo, todos los cristianos participamos en algún modo de la condición profética de Cristo.

4. JUSTICIA: Es la virtud según la cual damos a cada uno lo que necesita para ser persona, y no sólo aquello que le corresponde. En la Biblia tiene un sentido más amplio. Ser justo es estar en una buena relación con Dios, equivale a decir santo (Mt 5, 20). Al mismo tiempo, Dios que es justo por excelencia, es quien “justifica” o hace justo al hombre que se acerca a El. Por Cristo Dios ha justificado a todos los hombres (Rom 3, 21-26).


Ejercicios del TEMA 13

LOS GRANDES PROFETAS DE ISRAEL: AMÓS Y OSEAS

1. Después de leer el contenido de la ficha indicar con una V o con una F si las siguientes frases son verdaderas o falsas respectivamente.

a) _____ Amós y Oseas son dos profetas del reino del Norte.

b) _____ El oficio original de Amós era el de pastor. Vivía en las cercanías de Belén. De aquí fue enviado por Dios a Israel.

c) _____ Amós sólo hace denuncias contra Israel. No hace anuncios esperanzadores.

d) _____ La mujer de Oseas se llama Gomer.

e) _____ La experiencia personal del profeta Oseas es un símbolo de lo que ocurre entre Dios y su pueblo.

f) _____ La “Torah” es el nombre que se da a los primeros cinco libros de la Biblia.

g) _____ “Yahveh” es el nombre de un profeta de Israel.

2. Los cristianos, igual que los profetas, deben comprometerse, y ser hombres de su tiempo, capaces de luchar para ser fiel a Dios y fiel al hombre. Copiemos y completemos algunos textos que se refieren a Amós y Oseas.

a) La vocación Amós no nació como profeta sino:

_____________________________________________________ (Am 7, 14)

b) El profeta Amós presenta las siguientes imágenes:

Am 3, 4: _______________________________________________________

______________________________________________________________

Am 3, 5: _______________________________________________________

______________________________________________________________

Am 3, 6: _______________________________________________________

______________________________________________________________

c) Presenta estas imágenes para indicar que si “habla el Señor”:

______________________________________________________ (Am 3, 8)

d) El profeta Oseas recuerda que Dios es como un Padre e Israel como:

______________________________________________________ (Os 11, 1)

e) También Oseas dice que Israel reconocerá a Dios y por eso un día lo va a reconocer como:

_______________________________________________________ (Os 2, 2)

f) El profeta anuncia castigos que sobrevendrán; como ir en exilio a:

______________________________________________________ (Os 11, 5)

g) Nunca se puede olvidar que Dios no es:

______________________________________________________ (Os 11, 9)

3. Pregunta personal

No diremos más “¡Dios nuestro!” a la obra de nuestras manos (Os 14, 4).

Haga una lista de cosas que para ti reemplazaron a “Dios” y pide perdón al Señor por estas faltas.

1 comentario:

Ben dijo...

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